Abies alba

ABETO BLANCO

Árbol cónico de hasta 50 m de altura, con la corteza lisa y grisácea. Es un buen árbol maderero y productor de trementina.

Tamaño

Los abetos, que pertenecen a la familia de las Pináceas, son árboles de gran desarrollo, 40 m o más en ejemplares adultos. A. alba puede alcanzar hasta 50 m de altura.

Hojas

Las hojas son de tipo acícula, pequeñas, planas y rígidas. Son flexibles, con la punta roma; se disponen en dos filas y miden de 1,5 a 3 cm de longitud.

Floración

Al igual que el resto de las coníferas, los abetos emiten un tipo muy primitivo de flores, llamadas conos o estróbilos, en las que los óvulos aparecen desnudos y reciben directamente el polen transportado por el viento. En el caso concreto de los abetos, los conos se presentan separados por sexos sobre un mismo individuo, los masculinos en la parte inferior de las ramas y los femeninos, que después se convertirán en el cono fructífero, creciendo erectos sobre ellas. En ambos casos tienen una coloración llamativa. Los conos, que son erguidos y miden de 10 a 20 cm de longitud, al madurar pierden las escamas y queda sólo el eje central.

CUIDADOS

Temperatura

Los abetos de mayor desarrollo requieren localizaciones frescas, e incluso frías. Admiten casi cualquier situación siempre que no pasen demasiado calor en verano.

Agua

Agradece tener una humedad constante en el terreno.

Humedad

Necesitan una pluviometría elevada.

Terreno

Prefieren terrenos profundos y frescos, con abundante materia orgánica en descomposición, la cual, en la naturaleza abierta, procederá en gran parte de la cantidad de acículas que ellos mismos desprenden.

CONSEJOS

Usos

Con independencia de su tamaño, a estos árboles les conviene vivir a cierta altura sobre el nivel del mar, de forma preferente por encima de los 700 m y hasta casi los 2.000, siendo por ello ideales para zonas de montaña donde las inclemencias del tiempo le serán muy beneficiosas.