Phalaenopsis cornu-cervi
CUERNO DE CIERVO
Orquídea epífita originaria del sureste de Asia -Malasia, Borneo y Filipinas-, robusta y con numerosas raíces producidas sobre un tronco rizomatoso. Crece sobre troncos de árboles con abundante musgo, protegidas de la luz solar directa y en condiciones de humedad abundante.
Hojas
Se desarrolla a partir de un rizoma del que parten dos hojas cada año. Las hojas son grandes, carnosas, brillantes y elípticas. Normalmente caen las más viejas al mismo tiempo dejando la planta con cuatro o cinco hojas. De la base de las nuevas hojas nacen los escapos florales.
Floración
Las flores son carnosas y cerosas, en colores que van del amarillo al amarillo verdoso, a veces manchadas o ralladas hasta el punto de que apenas asoma el amarillo. Pertenece al grupo de las Stauroglottis que presentan flores más pequeñas y estrelladas con los sépalos tan anchos como los pétalos, frente a las Euphalaenopsis, cuyas flores presentan pétalos más anchos que los sépalos dotándolas de un contorno redondeado.
CUIDADOS
Luz
Como regla general las orquídeas rechazan el sol directo. Prefieren una situación en la que gozando de abundante claridad, la luz sea ligeramente difusa. Aumenta la luminosidad en otoño para reforzar la planta y favorecer la floración.
Temperatura
El ambiente debe ser cálido y húmedo, no menos de 16ºC durante la noche y no más de 35ºC durante el día.
Agua
Aunque durante la primavera y el verano puedes regar con cierta generosidad, con la llegada del invierno debes obrar con extrema prudencia, limitándote al mantenimiento de un cierto grado de humedad en la tierra. Riega con agua de lluvia o filtrada -no calcárea-.
Abonado
Se debe aportar un abono rico en nitrógeno -30/10/10- dos veces al mes, sobre todo durante el periodo de crecimiento.
Humedad
La humedad necesaria es del 70%, aunque soporta ambientes más secos que las demás especies. El aire debe ser húmedo, pero evitando las corrientes frías. Por lo general, si se mantiene un buen grado de humedad ambiental, son poco frecuentes los problemas fitosanitarios. En lugares secos pueden aparecer brotes de pulgones y araña roja, además de producirse amarilleamientos en las hojas. Sin embargo, no debes pulverizar en invierno aunque sí puedes pasar una esponja húmeda por las hojas.
Tierra
En el substrato ha de predominar la materia orgánica. Agradecerá una mezcla de corteza de pino y bolas de arcilla. No debe trasplantarse con frecuencia.
Maceta
Las raíces de las Phalaenopsis tienen clorofila -son de color verde- por lo que pueden realizar la fotosíntesis. Es por este motivo que debemos proporcionarles macetas transparentes.
Poda
Cuando florezca el último capullo se puede cortar el tallo floral por encima de un nudo, lo que dará lugar a un segundo tallo unas semanas después. Además, en otoño y en primavera se deben retirar las raíces dañadas.
Propagación
Los nuevos brotes -Keikis- deben ser suficientemente grandes antes de ser trasplantados.
CONSEJOS
Acompañantes
Es mejor que estén solas combinadas entre sí aunque también combinan felizmente con bromelias. No intentes más combinaciones que estas pues son consideradas plantas celosas.