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Es una de las plantas de interior más populares y extendidas en la actualidad. Sus hojas despliegan un impresionante espectáculo de verdor, siempre que dispongan de suficiente espacio para crecer. Originaria de México, la Monstera a menudo se confunde con algunas variantes de Philodendron, y en su hábitat natural crece como una enredadera, al igual que muchas de las otras 50 especies que componen su género.

Tamaño

A pesar de que las macetas típicas de 12 cm suelen tener una altura de 46-60 cm al comprarlas, su crecimiento es gradual hasta alcanzar un considerable tamaño, con hojas de aproximadamente 46 cm de diámetro. Puede llegar a medir hasta 230 cm después de muchos años de cuidados.

Desarrollo

Aunque sus tallos son fuertes y vigorosos, requieren el apoyo de un tutor al que la planta se aferrará con firmeza mediante sus raíces aéreas, alternando con las hojas. Si el tutor es de musgo y se mantiene húmedo, se fomentará en gran medida el desarrollo de estas raíces. El crecimiento es lento, produciendo una o dos hojas al año como máximo.

Hojas

Su rasgo distintivo son sus grandes y resplandecientes hojas de color verde oscuro. Al principio, tienen forma de corazón y con el tiempo adoptan un característico aspecto hendido, con lóbulos de hasta 25 cm de longitud, que recuerdan la disposición de las costillas, por lo que también es conocida como costilla de Adán.

Floración

Aunque la floración no es común, los ejemplares adultos bien adaptados pueden producir flores si reciben el cuidado adecuado. En verano, las plantas maduras exhiben flores amarillas similares a las del aro, seguidas rápidamente por un fruto comestible cuando madura por completo.

Longevidad

Con un cuidado mínimo, su vida puede extenderse durante muchos años.

CUIDADOS

Luz

Tolera áreas con poca luz, lo que la hace muy popular como planta de interior. Sin embargo, debe evitarse la exposición directa al sol, especialmente en verano.

Temperatura

Requiere un mínimo de 13°C en invierno, aunque puede tolerar 10°C si se disminuye el riego. En verano, prospera a temperaturas más altas, incluso hasta 24°C.

Agua

Prefiere no ser regada en exceso y es mejor dejar que el sustrato se seque entre riegos. Se debe evaluar el estado del suelo para determinar si necesita agua. En verano, regar una vez a la semana es suficiente, a menos que el calor sea intenso. En invierno, cada 14 días es adecuado.

Abonado

Durante el verano, cuando está en pleno crecimiento, se puede añadir abono líquido al agua cada 21 días.

Humedad

Al igual que otras plantas de selva, prospera en condiciones de alta humedad. Se recomienda rociar regularmente con agua suave y colocar la maceta sobre guijarros húmedos o en un recipiente con turba húmeda.

Limpieza

Es importante limpiar las hojas con un paño húmedo, sosteniéndolas con cuidado por debajo.

Atmósfera

Esta planta es muy tolerante y es perfecta para oficinas y salas de exposiciones.

Tierra

Prefiere sustratos sueltos de turba que faciliten un buen drenaje.

Maceta

Es aconsejable cambiarla de maceta una vez al año en primavera. Cuando alcance su tamaño máximo deseado, solo es necesario reemplazar la capa superior de tierra. Sostén la planta con un soporte de musgo.

Poda

Por lo general, no es necesaria. Si la planta crece demasiado, puede recortarse y volverá a crecer.

Propagación

A principios del verano, es posible propagarla mediante esquejes apicales de tallo, colocándolos en un propagador a una temperatura de 24-27°C. También se pueden utilizar esquejes de nudo, pero su crecimiento es más lento y requieren una temperatura más alta, alrededor de 34°C. Los esquejes apicales pueden enraizarse si se colocan en agua.

CONSEJOS

Acompañantes

Cuando son jóvenes, las monsteras combinan bien con cualquier planta de follaje verde y de color. A medida que maduran, es preferible cultivarlas solas.

Variedades

Existen variedades con hojas grandes, que aportan un acento exótico de planta tropical, y otras de menor tamaño que suelen desarrollarse como epífitas, es decir, sobre la superficie de otras plantas.