Fuchsia magellanica
FUCSIA
Es un arbusto nativo de Sudamérica reconocido por sus hermosas flores colgantes de colores cálidos, lo que le ha valido nombres populares como "pendientes de la Virgen" o "pendientes de la reina".
Tamaño
Puede alcanzar una altura máxima de cinco metros, aunque también existen variedades más compactas que no superan el metro de altura.
Hojas
Sus hojas son lanceoladas, aserradas y cubiertas de finos vellos a lo largo de las nervaduras y los bordes.
Floración
Las flores de la Fucsia son vivamente coloreadas y generalmente péndulas. El cáliz es largo y tubular, con ocho lóbulos, mientras que la corola está formada por cuatro o cinco pétalos (aunque algunas especies pueden carecer de ellos). La floración se extiende durante la temporada cálida del año, aunque algunas variedades pueden florecer solo durante unas semanas en primavera tardía o verano.
Fruto
La Fucsia produce bayas comestibles.
CUIDADOS
Luz
Las Fucsias deben ubicarse en lugares sombreados o con sombra parcial que las protejan durante las horas centrales del día.
Temperatura
Son resistentes a los fríos invernales, siempre y cuando las temperaturas mínimas no desciendan por debajo de los -10°C de forma prolongada. En invierno, se recomienda proteger el suelo con ramas, turba o mantillo para permitir que la planta rebrote desde la base en primavera, incluso si ha sufrido daños por las heladas. Además, es importante resguardarlas de los vientos secos.
Agua
En áreas cálidas, se debe controlar de cerca la humedad del suelo. Es preferible regar en cantidades moderadas pero con mayor frecuencia.
Abonado
Se recomienda utilizar fertilizantes líquidos en el agua de riego de forma periódica para prolongar la floración. También se puede aplicar fertilizantes de liberación lenta en la capa superficial del suelo. Durante el invierno, se permite un descanso en el abonado.
Humedad
Las hojas de la Fucsia requieren una atmósfera húmeda, por lo que se recomienda rociarlas con frecuencia.
Maceta
En primavera, se recomienda reemplazar la mitad del sustrato viejo por uno nuevo, ligero y poroso.
Terreno
Las Fucsias necesitan un suelo rico en materia orgánica, preferiblemente de naturaleza turbosa, y con una humedad adecuada durante todo el año. Se benefician de la adición regular de mantillo, turba o compost en primavera y otoño, seguido de una ligera labor para incorporarlo al suelo.
Poda
La poda es una tarea necesaria durante el invierno para mantener la salud y apariencia de la planta. Se recomienda eliminar ramas muertas, secas, rotas o enfermas, así como los rebrotes que surjan desde la base y las ramas mal ubicadas o débiles que afecten la estética. Para promover una floración vigorosa y mantener un aspecto compacto y redondeado, se puede realizar el pinzamiento de los brotes tiernos por encima del segundo nudo. Esta operación puede repetirse cada 8 a 10 semanas.
Propagación
La Fucsia se puede reproducir mediante esquejes de aproximadamente 8 cm de longitud, los cuales deben enraizarse en un ambiente húmedo. Los esquejes se plantan en macetas de tamaño adecuado, y una vez que sus raíces toquen las paredes de la maceta, se deben trasplantar a un recipiente más grande.
CONSEJOS
Usos
En el jardín, las Fucsias se adaptan a diversas situaciones. Son ideales para crear composiciones arbustivas que combinen diferentes tipos de flores. También se pueden colocar en la parte superior de muros de contención para que crezcan formando cascadas vegetales, o cultivarlas en cestas o canastillos colgantes. Además, son aptas para el cultivo en macetas, lo que permite decorar balcones y terrazas. Una opción interesante es ubicarlas en orientación oeste, de manera que los últimos rayos de sol resalten aún más el colorido de sus flores.