Vid

Vid

Vitis vinifera

División: Angiospermas
Clase: Eudicotiledóneas
Orden: Vitales
Familia: Vitaceae

🍇 Vitis vinifera, conocida como vid, es una trepadora leñosa que desarrolla racimos de uvas y hojas grandes con nervaduras marcadas. Destaca por la transformación otoñal de su follaje, que adquiere tonos dorados y rojizos. Su fruto emblemático y su larga relación con la cultura humana la hacen una planta profundamente significativa.

Originaria de la región mediterránea, esta especie prospera en climas templados, donde el sol brilla intensamente y la tierra es rica en nutrientes. Se desarrolla como una planta trepadora, capaz de alcanzar grandes alturas gracias a sus zarcillos que se enrollan alrededor de soportes. Resistente a diversas condiciones climáticas, se adapta bien a suelos bien drenados y soleados. Su reproducción se lleva a cabo principalmente a través de semillas, pero también se propaga mediante esquejes y acodos. Este árbol no solo produce frutos deliciosos, sino que también juega un papel fundamental en el ecosistema, atrayendo a polinizadores y contribuyendo a la formación de hábitats saludables en su entorno.
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📏 Tamaño
Vitis vinifera, la vid común, es una trepadora leñosa de porte medio que puede alcanzar entre 5 y 15 metros de longitud si dispone de soporte adecuado. Su crecimiento es vigoroso y rápido, extendiéndose mediante sarmientos flexibles que se aferran con zarcillos, lo que la convierte en una planta capaz de cubrir grandes superficies en poco tiempo.
🌿 Hojas
Las hojas de Vitis vinifera son grandes, palmadas y de forma variable, generalmente con tres a cinco lóbulos y bordes dentados. Su superficie es rugosa y de color verde intenso en primavera y verano, tornándose amarillenta o rojiza en otoño antes de caer, lo que aporta también un atractivo estacional a la vid.
🌸 Floración
La floración ocurre a finales de la primavera o inicios del verano, cuando la vid produce pequeñas flores verdosas reunidas en racimos poco llamativos. Aunque carecen de valor ornamental, estas flores son fundamentales, ya que tras su polinización dan origen a los racimos de uvas que maduran durante el verano y se cosechan en otoño.
🍏 Fruto
El fruto es la uva, una baya carnosa y jugosa que se agrupa en racimos de tamaño y forma variables según la variedad. Las uvas pueden ser verdes, amarillas, rojas, moradas o negras, y su pulpa contiene azúcares, agua y compuestos aromáticos que las hacen aptas tanto para el consumo en fresco como para la elaboración de vinos, pasas, mostos y otros productos derivados.
🕰️ Longevidad
Es una planta muy longeva que, con los cuidados adecuados, puede vivir entre 50 y 80 años, aunque algunos viñedos históricos cuentan con cepas centenarias aún productivas. Su longevidad depende en gran medida de la poda, el manejo sanitario y las condiciones del terreno, lo que permite que mantenga su vigor y capacidad de producir uvas de calidad durante décadas.
🧬 Variedades
La especie Vitis vinifera cuenta con una gran diversidad de variedades, desarrolladas a lo largo de siglos de cultivo y selección. Algunas se destinan principalmente a la vinificación, como la Cabernet Sauvignon, Tempranillo o Chardonnay, mientras que otras se cultivan para consumo en fresco, como la Thompson Seedless o la Red Globe. Existen también variedades utilizadas para la producción de pasas, así como cultivares locales adaptados a climas y suelos específicos, lo que convierte a la vid en una de las especies frutales con mayor riqueza genética y cultural en el mundo.
☀️ Luz
Necesita una exposición a pleno sol para desarrollarse correctamente y garantizar una buena producción de uvas. Requiere al menos 6 a 8 horas diarias de luz directa, ya que en condiciones de sombra su crecimiento se debilita y los racimos maduran con menor calidad y contenido de azúcares.
🌡️ Temperatura
Prospera en climas templados y soleados, con temperaturas óptimas de entre 20 y 30 °C durante la temporada de crecimiento. Tolera inviernos fríos y requiere un período de reposo invernal con temperaturas bajas, pero es sensible a las heladas tardías en primavera y al calor extremo por encima de 35 °C, que pueden dañar brotes, flores o afectar la calidad de los frutos.
💧 Riego
El riego debe ser moderado y adaptado a las fases de desarrollo de la planta, evitando tanto la sequía prolongada como el exceso de agua. Durante la brotación y el crecimiento de los racimos es importante mantener un nivel de humedad constante, mientras que en la maduración de las uvas se recomienda reducir el riego para concentrar azúcares y mejorar la calidad del fruto.
💨 Ambiente
Se desarrolla mejor en ambientes cálidos y soleados, con estaciones bien marcadas que incluyan inviernos fríos para el reposo y veranos secos para la maduración de la uva. Prefiere climas con buena ventilación, ya que el aire en movimiento reduce la humedad excesiva y ayuda a prevenir enfermedades fúngicas que pueden afectar a hojas y racimos.
🌱 Sustrato
Prefiere suelos profundos, sueltos y bien drenados, con buena capacidad de retener humedad sin encharcarse. Se adapta a distintos tipos de terreno, desde arenosos hasta arcillosos, pero alcanza su máxima calidad en suelos pedregosos o calcáreos, que favorecen un buen drenaje y aportan características particulares al sabor y aroma de las uvas.
🍂 Abonado
El abonado debe ser equilibrado y adaptado a las necesidades del viñedo, aportando nitrógeno en primavera para favorecer el crecimiento vegetativo, y fósforo y potasio para estimular la floración, el cuajado y la maduración de los racimos. Es recomendable complementar con materia orgánica bien descompuesta en invierno, lo que mejora la estructura del suelo y asegura una nutrición constante durante el ciclo vegetativo.
🪴 Cultivo
La plantación se realiza generalmente en invierno o a inicios de la primavera, cuando la vid está en reposo vegetativo. Se recomienda abrir hoyos amplios y profundos, colocar la planta injertada asegurando que el punto de injerto quede por encima del nivel del suelo. En general se recomienda dejar entre 2 y 3 metros entre filas y de 1 a 1,5 metros entre plantas. Puede cultivarse en maceta, aunque requiere recipientes grandes y profundos que permitan el desarrollo de sus raíces y la instalación de un tutor o emparrado para guiar los sarmientos. En este caso, es necesario un riego más frecuente y un buen abonado para suplir la limitación del sustrato. El trasplante debe realizarse igualmente durante el reposo vegetativo, en invierno o a comienzos de la primavera, renovando parte del sustrato y eligiendo un contenedor mayor si las raíces ya ocupan todo el espacio disponible.
✂️ Poda
La poda es esencial tanto para regular su producción como para mantener la planta en buen estado. Se realiza principalmente en invierno, durante el reposo vegetativo, eliminando sarmientos viejos y seleccionando los que darán fruto en la siguiente temporada. También se practican podas en verde en primavera y verano, con despuntes y aclareos de hojas o racimos, que mejoran la aireación y la maduración de las uvas.
🧪 Propagación
La propagación es bastante sencilla. Lo más práctico es hacerlo a partir de esquejes de madera leñosa, que enraízan con facilidad si los plantas en invierno o principios de primavera.
✨ ¿Algo más?
Retira los sarmientos secos tras la poda y limpia el suelo de hojas y restos de uvas caídas para prevenir plagas. Mantén el área despejada y aireada.
Vid (Vitis vinifera)
Ubicación
Sus largos sarmientos trepadores permiten cubrir pérgolas, muros y enrejados, aportando sombra natural y un efecto estético muy atractivo. Además, en jardines comestibles combina la belleza del follaje con la utilidad de sus frutos, integrando función y decoración en un solo cultivo.
Acompañantes
Aromáticas como el romero, la lavanda y el tomillo ayudan a repeler insectos y aportan un contraste decorativo bajo las parras. También se asocia bien con rosales, que sirven como indicadores tempranos de plagas como el oídio, y con leguminosas de porte bajo, que enriquecen el suelo con nitrógeno y favorecen un entorno más saludable para la vid.

Conócelas también aquí: Salvia rosmarinus, Lavandula angustifolia, Thymus vulgaris, Rosa spp., Phaseolus vulgaris, Pisum sativum, Vitis vinifera.

Usos y recolección
La vid se cultiva principalmente por sus uvas, consumidas frescas, secas o en forma de vino, y por sus hojas y semillas, con propiedades antioxidantes y circulatorias. La cosecha se realiza a finales del verano o comienzos del otoño, cuando los racimos alcanzan su color, dulzor y aroma característicos. Las uvas pueden consumirse frescas, secarse al sol para obtener pasas o prensarse para la elaboración de mosto y vino. Las hojas jóvenes se conservan en salmuera o secas.
🍷 En numerosas culturas, el vino es símbolo de vida, celebración, fertilidad y transformación. En la mitología griega estaba asociado a Dionisio (Baco para los romanos), y en muchas religiones ha sido protagonista de rituales sagrados y tradiciones ancestrales.
🍇 La vid tiene una capacidad única: puede crecer en condiciones duras, con poca agua y en suelos pobres. De hecho, cuanto más sufre (con moderación), mejores uvas produce. Por eso muchas de las mejores zonas vitícolas tienen climas secos y suelos pedregosos.
Hojas amarillas o con manchas claras
Puede deberse a carencia de hierro (clorosis férrica) o exceso de riego. Asegura un buen drenaje, usa agua sin cal si es posible, y aplica quelatos de hierro si las hojas presentan nervios verdes y el resto amarillento.
Hojas secas o con bordes marrones
Suele deberse a sol intenso combinado con falta de agua. Aunque es resistente a la sequía, durante el verano necesita riegos moderados y constantes, sobre todo si está en maceta.
Hojas con manchas blancas o grises
Es un síntoma habitual de oídio, un hongo común en la vid. Aumenta la ventilación, evita mojar las hojas al regar, y aplica tratamientos con azufre o fungicidas ecológicos si la infección avanza.
Poca floración o racimos escasos
La falta de sol o una poda inadecuada pueden reducir la producción. La vid necesita pleno sol y una poda correcta a finales del invierno, eliminando el exceso de madera vieja y dejando yemas fértiles.
Frutos que no maduran o quedan pequeños
Puede deberse a falta de sol, exceso de hojas o riego inadecuado. Asegura buena exposición solar, realiza un aclareo de racimos si hay exceso y mantén el riego constante durante el desarrollo del fruto.
Presencia de pulgones, mosca blanca o mildiu
Son plagas frecuentes en vid. Inspecciona regularmente el envés de las hojas y los brotes. Si hay plagas, trata con jabón potásico o cobre, y favorece la ventilación entre plantas.
Crecimiento desordenado o ramas muy largas
Es normal en primavera-verano si no se controla. La poda de formación y mantenimiento es fundamental para guiar su crecimiento y asegurar buena producción y estética.
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