Artemisa
Artemisia vulgaris
División: AngiospermasClase: EudicotiledóneasOrden: AsteralesFamilia: Asteraceae
🌿 Artemisia vulgaris, conocida como artemisa, es una planta herbácea de hojas verdes por arriba y plateadas por el envés, creando un contraste elegante al moverse con el viento. Destaca por su porte erguido y su follaje fino, que da textura y volumen. Su aspecto sobrio y su historia tradicional le dan un aura de planta sabia y discreta.
Originaria de Eurasia, la artemisa crece en praderas, cunetas y suelos alterados que reciben sol abundante. Tolera bien el frío y los cambios bruscos de temperatura. Se reproduce por semillas y por rizomas que se extienden rápidamente. En colonias forma masas altas y aromáticas que dominan el paisaje con su follaje grisáceo.

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☀️ Luz
Prefiere el pleno sol, aunque puede tolerar la semisombra ligera. Con buena exposición solar su follaje es más aromático y vigoroso. En lugares demasiado sombríos crece más débil y pierde parte de su aroma característico.🌡️ Temperatura
Se adapta bien a climas templados y fríos, soportando heladas invernales sin problemas. Su rango ideal de crecimiento se sitúa entre 15 °C y 25 °C, aunque puede resistir tanto fríos de –20 °C como veranos calurosos y secos.💧 Riego
Requiere un riego moderado y ocasional, ya que es una planta muy resistente a la sequía. Prefiere suelos bien drenados y no tolera el encharcamiento. Durante el verano, en climas muy secos, conviene regarla una o dos veces por semana, mientras que en el resto del año suele bastar con el agua de lluvia.💨 Ambiente
Se adapta fácilmente a distintos ambientes, aunque prefiere los templados y secos, con buena aireación. No requiere humedad ambiental alta y puede crecer bien incluso en suelos pobres o márgenes de caminos. Evita atmósferas cerradas o excesivamente húmedas, que favorecen hongos en su follaje.🌱 Sustrato
Prefiere suelos ligeros, medianamente fértiles y bien drenados, aunque tolera terrenos pobres y pedregosos. Se adapta a una amplia gama de pH, desde ligeramente ácidos hasta alcalinos. Lo fundamental es evitar el exceso de humedad: un drenaje deficiente provoca amarillamiento y pudrición de raíces. Ideal para lugares soleados y suelos secos.🍂 Abonado
Crece bien en suelos medianamente fértiles, pero agradece un aporte anual de materia orgánica. Aplica compost maduro o humus de lombriz en primavera para favorecer el rebrote y estimular su aroma natural. Evita los abonos químicos o en exceso, ya que disminuyen su contenido de principios activos.🪴 Cultivo
Agradece plantarse en otoño, cuando el terreno conserva humedad y las temperaturas aún son suaves. Tiende a extenderse por rizomas, así que deja algo de espacio libre alrededor. Cada cierto tiempo conviene dividir las matas para controlar su expansión y mantenerlas vigorosas.✂️ Poda
Conviene podarla al final del invierno o tras la floración, cortando los tallos secos o debilitados a ras del suelo. Es una planta de crecimiento vigoroso, por lo que también puedes recortarla a mitad del verano si se expande demasiado. Estos cortes estimulan nuevos brotes y ayudan a mantenerla controlada.🧪 Propagación
Se propaga sin dificultad mediante división de mata o por esquejes de raíz en primavera. Las semillas también germinan con facilidad si se siembran sobre la superficie de un sustrato suelto y húmedo, aunque las plantas resultantes pueden variar ligeramente. La división garantiza ejemplares idénticos y un crecimiento más rápido.✨ ¿Algo más?
Corta las flores secas tras la floración para evitar la dispersión excesiva de semillas. Retira las hojas dañadas o amarillentas y limpia la base de la planta para mantener buena ventilación. En otoño, recorta los tallos envejecidos y elimina los restos del suelo.
Foto de R.A.Nonenmacher, CC BY-SA 4.0
Ubicación
La artemisa común es una vivaz robusta y aromática que se utiliza en jardines naturalistas y zonas de bajo riego. Su follaje gris verdoso y su porte erguido aportan textura y movimiento en borduras o macizos mixtos. Es una planta muy resistente, capaz de prosperar en suelos pobres y secos. Su aroma característico y su aspecto silvestre la convierten en una buena opción para huertos ecológicos y jardines de inspiración rústica.Acompañantes
Se asocia con especies de carácter rústico y aspecto natural, como Echinacea purpurea, Rudbeckia hirta o Coreopsis verticillata. En borduras o praderas naturalistas aporta un fondo gris verdoso que realza los colores cálidos de las flores, creando conjuntos equilibrados y resistentes.Conócelas también aquí: Echinacea purpurea, Rudbeckia hirta, Coreopsis verticillata.
Usos y recolección
La artemisa común es apreciada por sus propiedades digestivas, emenagogas y relajantes, y también como planta ritual y aromática desde la antigüedad. Se recolectan las partes aéreas antes de la floración, cuando las hojas concentran mayor cantidad de aceites esenciales. Se secan extendidas en capas finas, a la sombra y en un ambiente ventilado. Una vez deshidratadas, se guardan en frascos herméticos o se emplean frescas para preparar infusiones o baños relajantes.🌿 La Artemisia vulgaris posee unas hojas con una curiosa adaptación: el envés está cubierto de una fina capa de pelillos blanquecinos que reflejan la luz solar y reducen la pérdida de agua, una estrategia perfecta para sobrevivir en zonas secas o expuestas al viento. Además, esas diminutas vellosidades ayudan a retener aceites esenciales que protegen la planta de insectos y hongos. Incluso su olor característico, tan particular, actúa como un escudo natural que la defiende de los herbívoros. Todo en ella está pensado para resistir y persistir, discreta pero tremendamente eficiente.
🦋 Sus flores discretas pero ricas en polen atraen abejas, mariposas nocturnas y otros insectos polinizadores. También sirve de alimento para las orugas de varias especies de mariposas, como la Tyria jacobaeae. Además, su olor y sus aceites naturales actúan como repelente de insectos no deseados, protegiendo las plantas vecinas. Curiosamente, cuando crece en grandes grupos, tiende a alterar el suelo con sus compuestos químicos, dificultando que otras especies la desplacen; una estrategia de defensa vegetal muy eficaz y elegante.
🔮 Ha sido considerada una planta mágica y protectora en muchas culturas. En la Edad Media se colgaban ramilletes de artemisa en las puertas para ahuyentar los malos espíritus y proteger durante los viajes. Los romanos la colocaban en las sandalias de los caminantes para aliviar el cansancio, y en Asia se ha usado en la medicina tradicional para la moxibustión, un tratamiento en el que se quema cerca de la piel para estimular la energía vital. Incluso se le atribuyó poder profético: se decía que ayudaba a tener sueños lúcidos y visiones claras, por eso era la “planta de las brujas” y de los sabios antiguos.
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